viernes, 27 de abril de 2012

Semana de locura

La vida puede colmarte la paciencia y parecer que no hay respiro entre tantos contratiempos, sin embargo, probé ayer una deliciosa ensalada, una exquisita sangría y una grata compañía con una buena amiga. Por más que el viernes de ajetreos tuviera para MÍ, no dejó de ser VIERNES y, al final, pude gozar de salir temprano, ver a mi cachorro y charlar tranquilamente con mi marido. Después de todo, mi bono es un fin de semana más dos días extras sin laborar. Vida: estamos a mano. Muchas cosas por relajar... ya trabajé arduamente ahora a descansar. Padre! Ya pagaron ! Digo, es algo que me preguntarías, o más bien, le dirías a mi mamá que me preguntara ella.

lunes, 23 de abril de 2012

Otro 23...

Otro día, semana, mes... sin ti. Durante tu partida mi mundo se ha vuelto muy difícil, en absolutamente todos los aspectos y roles de mi vida. Al parecer, lo más duro ya pasó. Sin embargo, he de señalar que la felicidad se nos escabulle más tarde que temprano, jugando a las escondidas en unas temporadas más que en otras. Trato de esforzarme, siento a veces que te lo debo, de ser mejor persona, para poder seguir liderando a los demás. A mi familia, a mis alumnos, a mis amigos... Siempre quisiste que fuéramos chingones y humildes a la vez. Que razonáramos de tal manera de ayudar y construirnos una vida de bien. Me niego a que seas un recuerdo y nada más. Te debo hasta mi nombre: Cinthya. Y hasta ahora que lo sé o que lo recuerdo, te agradezco y te amo más. No temas venir a mis sueños como lo has hecho antes, no temas nada. Te extraño Padre.